Este artículo fue originalmente publicado el pasado 25 de noviembre de 2020 en el medio El Orden Mundial. El autor es el investigador junior del Navarra Center for International Development, David Soler Crespo. A continuación se reproduce parcialmente el artículo. Puede consultar el artículo original aquí, restringido a suscriptores de El Orden Mundial.
África tiene una larga tradición de protestas, pero este año y el anterior se están alcanzando récords. A través de redes sociales, la creciente juventud africana se está organizando para manifestarse contra la corrupción, el desempleo y unos líderes ancianos y autoritarios que cortan internet y reprimen a sus ciudadanos. La brecha generacional en África, el continente más joven del mundo, puede convertirse en una amenaza si no se revierte la falta de oportunidades y se abren las puertas de la política a los jóvenes.
El peaje de Lekki es una de las principales vías de entrada a Lagos, la ciudad más poblada de Nigeria con más de trece millones de habitantes. El paso estaba bloqueado desde principios de octubre por manifestantes que protestaban pacíficamente contra la brutalidad policial. Exigían desmantelar la Unidad Especial Anti-Robo de la policía (SARS, por sus siglas en inglés), creada en 1992 ante el incremento de la criminalidad y acusada de extorsiones, torturas y ejecuciones extrajudiciales. Los manifestantes no se conformaron con la promesa gubernamental de desmantelar el cuerpo y extendieron sus protestas contra la corrupción, el desempleo y la mala gobernanza del país.
Todo cambió el martes 20 de octubre. El gobernador de la región ordenó un toque de queda a partir de las cuatro de la tarde. Los manifestantes seguían allí dos horas después del límite, de pie y en silencio cuando llegaron los soldados. Poco antes de las siete, los militares comenzaron a disparar a los manifestantes, dejando al menos 38 fallecidos, según Amnistía Internacional. El presidente Muhamadu Buhari salió en televisión más de dieciséis horas después para recomendar a los manifestantes que aceptaran las...
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