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05 de Diciembre, 2019
Apariciones en los medios /
Escrito por NCID

Este artículo fue originalmente publicado el 5 de diciembre de 2019 en el medio Africaye. El autor es el investigador junior del Navarra Center for International Development David Soler Crespo. A continuación se reproduce parcialmente el artículo. Puede consultar el artículo original aquí.


En el sur de África, 2019 ha sido un año electoral intenso. En Sudáfrica, Namibia y Mozambique los partidos en el gobierno han podido revalidar su mandato en el poder, pero detrás de cada victoria dejan un halo de duda que confirma su envejecimiento.

Los Antiguos Movimientos de Liberación del Sur de África anclados al poder

El Congreso Nacional Africano (CNA) liderado por Cyril Ramaphosa en Sudáfrica cosechó su peor resultado en unas elecciones generales con un 57,50% de los votos y perdiendo 19 asientos en el parlamento. El declive económico del país —con un crecimiento reducido al 0.5% y bajo amenaza de una rebaja del crédito a bono basura— ahuyentan a inversores a los que el magnate Ramaphosa está siendo incapaz de convencer desde la butaca de presidente. Por su parte, en Namibia la Organización del pueblo de África del Sudoeste (SWAPO) también venció, aunque perdiendo 13 parlamentarios y una caída de apoyos al presidente Hage Geingob, de un 87% en 2014 a un 56.3%. La crisis financiera está afectando gravemente al país y se prevé una recesión del 1.7% este año.

Tanto el CNA como el SWAPO consiguieron revalidar sus victorias en unas elecciones consideradas como justas y fiables, algo que sin embargo no ocurrió en MozambiqueEl Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO) liderado por Filipe Nyusi arrasó con el 73.46% de los votos tras una campaña violenta que dejó 10 muertos, y con acusaciones por parte de observadores locales e internacionales de irregularidades en el censo de los votantes, así como la existencia de votantes fantasma.

Todos estos partidos llevan hermanados desde sus respectivas independencias bajo una misma asociación, los Antiguos Movimientos de Liberación del Sur de África (AMLSA). A ellos tres se unen la Unión Nacional Africana de Zimbabue – Frente Patriótico (ZANU-PF), el Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA) y el Chama Cha Mapinduzi (CCM) en Tanzania. Todos ellos representaron en sus inicios la lucha del nacionalismo africano contra las injusticias del colonialismo y el apartheid, y apoyaban un sistema de socialismo marxista que redistribuyera la riqueza entre la población negra.

Puede leer el artículo completo aquí.