Archivos
04 de Febrero, 2016
Noticias /
Escrito por NCID

Gustavo Fajardo del Centro de Estudios Monetarios y Financieros (CEMFI) presentó su investigación paper “Hierarchy, Coups and the Political Preferences of Army Officers” en la Universidad de Navarra un seminario organizado por el NCID

El proyecto trata de analizar el papel de la jerarquía intra-militar en los golpes de estado y cómo el ejército juega un papel importante en el campo de la política en los países con instituciones débiles.

"Mis resultados subrayan la importancia de las dinámicas internas dentro del Ejército. Si el golpe de estado se lleva a cabo dentro de las líneas de jerarquía, uno de los efectos podría ser el replanteamiento de las estrategias de patrocinio", dijo Gustavo Fajardo.

Con el fin de medir si los golpes de estado polarizan a los militares a lo largo de las líneas jerárquicas, el análisis de Gustavo Fajardo se centra en el caso de Venezuela tras el golpe fallido de Hugo Chávez en 1992 que lo llevó a la cárcel, antes de su exitosa campaña para ser presidente en 1998.

"Mi conclusión principal es que aquellas personas dentro del Ejército que tenían un rango superior a Chávez en el momento del golpe sufrieron un aumento en la probabilidad de que firmasen la campaña de petición en contra de su mandato presidencial", explicó Gustavo Fajardo. Esa petición fue organizada por la oposición política en el año 2003 y la lista de firmas, compiladas en un programa de software, denominado Maisanta fue publicada posteriormente.

"Combino las opciones de firma de Maisanta con la lista de los oficiales del Ejército y la información sobre las promociones", dijo Gustavo Fajardo, que lo llevó a "observar que superar el rango de Chávez aumenta la probabilidad de que firmasen la petición en contra de él, aproximadamente el doble".

La principal conclusión de su trabajo se basa en la forma en que los golpes de estado polarizan la preferencia hacia la insubordinación a lo largo de las líneas jerárquicas y establece que los agentes que superan a los líderes del golpe son menos propensos a apoyar sus propuestas.